Este será un año interesante para los inversionistas estratégicos. Los mercados se moverán dentro de un entorno de mayor crecimiento económico, inflación a la baja, recortes de tasas de interés, incertidumbre fiscal y un nuevo gobierno en Estados Unidos que promete flexibilizar las regulaciones del sector financiero, respaldar la industria cripto y seguir privilegiando las actividades extractivas.

Saber leer el panorama y tomar decisiones acertadas y a tiempo será clave para quienes quieran que sus portafolios crezcan. Forbes analizó la coyuntura macroeconómica y consultó expertos de diferentes sectores para presentarle las inversiones recomendadas para 2025.

Mercado bursátil

Volatilidad: alta
Riesgo: alto

Durante el 2024 el mercado vio cotizaciones récord para las grandes empresas de tecnología que están liderando el desarrollo de la inteligencia artificial, las siete magníficas: Alphabet, Amazon, Apple, Meta, Microsoft, Nvidia y Tesla dispararon los principales índices bursátiles y dejaron amplias ganancias. En 2025 habrán correcciones de mercado y aunque tendrán un buen desempeño, la dinámica va a cambiar.

“Las acciones más pequeñas dentro de Estados Unidos, que han estado bastante rezagadas frente a las grandes tecnológicas, se pueden beneficiar con las políticas que ha propuesto Trump: son positivas para los resultados de las compañías y para el consumo”, explicó Mauricio Guzmán, head de Estrategia de Inversión de Sura Investments.

Si bien las pequeñas y medianas acciones van a crecer para reducir la brecha, no significa que las gigantes deban salir de su portafolio, solo hay que ser más paciente para ver mejores resultados.“La inteligencia artificial aún está en sus primeras etapas aún estamos por descubrir los beneficios que va a generar en industrias finales” dijo Guzmán, mientras Wilson Tovar, jefe de Investigaciones de Acciones y Valores apuntó que “los rendimientos de la inteligencia artificial se van a dar en la próxima década”.

Además de la tecnología, los inversionistas van a querer monitorear el sector financiero, a nivel internacional, Trump propone bajar la regulación exigida a estas entidades en aras de dinamizar la industria; a nivel nacional, todo apunta a que los bancos ya tocaron un piso de utilidades y su senda de crecimiento es continua. De otro lado, la reactivación del sector inmobiliario se verá reflejada en ganancias para las compañías del sector constructor e industrial de materiales.

En Colombia, Sura Investments proyecta un crecimiento del índice Colcap de 15% en 2025; mientras que Acciones y Valores dice que “las acciones locales aún están muy por debajo de su valor fundamental. Por ejemplo, títulos como Grupo de Energía de Bogotá, Bancolombia, Grupo Argos, Corficolombiana, Davivienda y Mineros se perfilan como opciones atractivas en 2025”, frente a Ecopetrol, la comisionista tiene una postura neutral.

Entre tanto, la renta fija aún tendrá buen rendimiento en el inicio del año. “Las preocupaciones fiscales sufren por el montaje del gobierno Trump, y al tiempo -en Colombia- hay incertidumbre, todavía no sabemos qué va a pasar con el Sistema General de Participaciones y la Ley de Financiamiento, eso nos va a permitir tasa de interés altas en el primer semestre del año”, explicó Tovar.

Finca raíz

Volatilidad: baja
Riesgo: bajo

Los años posteriores a la pandemia no fueron los mejores para el sector inmobiliario, los créditos caros gracias al alza de tasas alejaron a los compradores y los constructores se enfrentaron a precios más altos para el acero y otros materiales a causa de la inflación.

Después de la tormenta en 2025 podría llegar la calma, en la segunda mitad de 2024 los bancos recortaron de manera importante las tasas de interés para créditos hipotecarios, y crece la presión del sector bancario para dinamizar la industria inmobiliaria, María Lorena Gutiérrez, presidente de Grupo Aval, dijo en noviembre que “ojalá tengamos más subsidios o por lo menos, ejecutemos, ya que el interés en adquirir vivienda ha mejorado”.

Con unos créditos más baratos, el alza del salario mínimo, el presupuesto para subsidios de 2025 y una inflación a la baja que podría normalizar los precios de los materiales de construcción, el próximo se perfila como un buen año para invertir en vivienda.

“Es una excelente opción para la construcción de portafolios de inversión: es una inversión que está respaldada por activos tangibles, es de largo plazo por lo que produce un flujo de caja recurrente y cuenta con el potencial de valorización en el tiempo”, explicó Jimena Maya, gerente de Estrategia, Innovación y Comunicaciones de Pei Asset Management.

Los inversionistas pueden optar por la compra de vivienda para rentar o vivir; o por invertir en fondos de renta fija o variable de títulos ligados al sector, existen portafolios diversificados por categoría, ubicación geográfica, y perfil de arrendatarios; y el otro año se verán beneficiados de todas esas transacciones que han estado represadas en la industria inmobiliaria.

Cuentas de ahorros

Volatilidad: baja
Riesgo: bajo

El miembro más reciente del club de las inversiones. Gracias a las competitivas ofertas de los neobancos y fintechs, las rentabilidades de doble dígito son una realidad en un producto financiero tradicional. Aunque algunos bancos han lanzado su contraoferta de bolsillos con crecimiento, aún no alcanzan las ganancias que ofrecen entidades como RappiPay, Lulo Bank, Nu, Ualá y Pibank.

La propuesta es atractiva: el dinero de la cuenta renta por encima del 10% efectivo anual -con los términos, condiciones y tasas de cada entidad-, el usuario tiene su capital disponible todo el tiempo, no hay comisiones y no hay riesgo de que caiga el ahorro.

Si bien las rentabilidades van a caer, especialmente con los recortes de tasas del Banco de la República, sigue siendo una inversión sencilla, segura y con buen retorno.

Además, aunque los neobancos ya son muy populares aún no igualan la base de usuarios de las entidades tradicionales, es de esperar que sigan con sus ofertas llamativas para captar más clientes. “Seguiremos comprometidos a mantener una propuesta atractiva que priorice el bienestar financiero de nuestros clientes”, afirmó Santiago Covelli, CEO de Lulo Bank, sobre el plan del banco para 2025. Mientras que Marcela Torres, country manager de Nu Colombia, aseguró que se mantendrán tan cerca como les sea posible a la tasa de referencia para mantener su oferta de rentabilidad.

Criptoactivos

Volatilidad: alta
Riesgo: alto

El bitcoin empezó el 2024 ligeramente por encima de los US$44.000 y el 22 de noviembre superaba los US$99.000, un aumento aproximado del 125%. Con el comportamiento de la primera criptomoneda se beneficiaron las demás y hay motivos para pensar que 2025 también será un buen año. La fortaleza de los activos digitales estará jalonada por tres fuerzas: apoyo desde la Casa Blanca, mayor adopción institucional y más regulación.

Donald Trump, presidente electo de los Estados Unidos que llega a la Oficina Oval a principios de 2025, ha dejado claro que apoyará a la industria cripto con políticas más flexibles, la materialización de sus propuestas de campaña le darán fuertes impulsos al sector, así como el anuncio de su triunfo causó el mayor crecimiento de las cripto en el año.

Mientras tanto, el lanzamiento de fondos cotizados en bolsa (ETFs) en enero en Estados Unidos amplió la participación institucional de las cripto, de acuerdo con Binance, desde su lanzamiento, nueve fondos han administrado US$68.500 millones, lo que representa alrededor de 5% de los bitcoin existentes. “Esta posición institucional no solo refleja la confianza en la viabilidad a largo plazo del bitcoin, sino que también resalta su papel creciente en el ecosistema financiero global”, explicó Guilherme Nazar, vicepresidente regional de Binance para América Latina.

No solo Estados Unidos será más abierto con los activos digitales. “El próximo año debería continuar esta tendencia -al alza- en la medida en que contemos con un mercado más maduro y que avance la regulación en diversos países, como ya sucede en Europa, México y Chile”, explicó Juanita Rodríguez Kattah, country manager de Bitso en Colombia.

Por Lina Vargas Vega